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Andrew Strom

Un llamado a la intercesión agonizante

Traducción de una prédica

(Nota: El autor está predicando en primer lugar a la iglesia de Estados Unidos. Pero las iglesias en América Latina están en gran medida copiando lo que hace la iglesia en Estados Unidos. Por tanto, el mismo mensaje se aplica también a América Latina. Quien cree que no es así, debe preguntarse primero si él mismo no es también un “pez que no puede ver el agua”, según el ejemplo que el autor pone hacia el final. Aunque no somos los líderes en esta apostasía, somos también culpables por seguir a los líderes equivocados.)

Quiero empezar con una pregunta: Si Juan el Bautista estuviera hoy en nuestro vecindario, ¿nosotros, los americanos de hoy, saldríamos a escucharle? ¿Los cristianos, saldríamos a escucharle? - La Biblia dice que toda Judea y toda Jerusalén salió a escucharle y ser bautizados por él; y Juan fue un predicador muy "pesado". Nosotros hoy - ¿iríamos a escucharle?
Juan no hizo milagros; no hizo nada divertido; ¡no tenía nada! - Por tanto, pienso que los cristianos de hoy le ignorarían. Los pastores y predicadores tendrían éxito en lo que los fariseos fracasaron: lograrían silenciarle, hacer que todo el mundo le ignore; y Juan no tendría otra salida que tomar el próximo barco e irse a predicar en otro lugar - por ejemplo en Africa.

Estoy muy preocupado por América. América es el último país de avivamiento que quedó en el mundo occidental. Otras naciones tienen avivamientos, porque tienen hambre por Dios, Nosotros no tenemos esta hambre.

Los Estados Unidos tienen 40% de asistencia a las iglesias, y tienen una historia de avivamientos cada 50 años, durante los últimos 250 años. Si este país pierde el próximo avivamiento, ¿adónde irá?
¿Estamos desesperados por un avivamiento? - Temo que no. Simplemente estamos engordados espiritualmente. Estamos en un estado peor que en cualquier momento del pasado. En el pasado, cada 50 años América experimentó un avivamiento. Y es por eso que los Estados Unidos se hicieron grandes. ¡No es porque "elegimos a los chicos buenos"! Sin embargo, muchos cristianos parecen creer esto. Creen que esta nación se hizo grande porque hemos elegido el gobierno correcto. ¡Esto es idolatría política! ¡Arrepiéntanse de la idolatría política! Es una idea necia, pensar que algún presidente, o algún ser humano, pueda darnos avivamiento. Hemos llegado a una situación tan absurda, que en 2004 los cristianos oraron con todo fervor porque parecía que Bush iba a perder las elecciones, pero NUNCA oraron de esta manera ferviente por avivamiento.

En 2001 oramos con fervor, cuando aquellas torres se vinieron abajo. Les digo que esto no lo fueron los musulmanes; esto fue el juicio de Dios. Lo sé porque todo el mundo se puso de rodillas en aquel día, y clamaron: "¡Dios, ten misericordia sobre nosotros!". - Por un breve momento parecía que el corazón de América se iba a abrir para Jesús; pero fue solo un momento pasajero. Nos hemos vuelto a nuestro egoísmo, y en los últimos cinco años hubo una verdadera orgia de compras insensatas, egoístas, como nunca antes en la historia. Por primera vez en la historia, incontables padres han vendido el futuro de sus hijos, hipotecando sus casas y endeudándose con compras para su propio placer - y esto es lo único que todavía mantiene la economía americana con vida. Les digo que esta burbuja va a reventar. ¡La mayoría de la gente ahora tiene más hipotecas sobre su casa de lo que la casa vale! ¡Las deudas acumuladas equivalen a un millón de millones de dólares! La mayoría de la gente será completamente incapaz de pagar sus deudas, y enfrentarán la bancarrota. Y todo esto solo para comprar más carros nuevos y otros "juguetes" para satisfacer nuestro egoísmo. Hasta el punto de que los cristianos piensan que un predicador no vale nada si no tiene el último modelo de carro.

Les quiero relatar brevemente la historia de esta nación, en cuanto a los avivamientos; porque ya no estamos conscientes de esta historia.
- Gales fue un país de avivamientos, mucho más que América - hasta 1904. Los avivamientos grandes eran cada 50 años, y en los tiempos intermedios hubo muchos avivamientos pequeños y medianos. Pero en 1904 tuvieron su último avivamiento, y pienso que nunca más tendrán uno. ¿Por qué?
- Quizás que tiene que ver con que este avivamiento terminó mal.
Pero más pienso que no estuvieron lo suficiente deseperados en sus oraciones para conseguir otro avivamiento. Y nosotros aquí tampoco estamos lo suficientemente desesperados para conseguir nuestro próximo avivamiento. ¿Quiénes tuvieron el siguiente avivamiento en Gran Bretaña (de lo que Gales es una parte)? El único lugar en Gran Bretaña que volvió a tener un avivamiento, fue la diminuta isla de las Hébridas. Y
ese avivamiento (en 1949) es famoso hasta hoy. ¿Por qué? ¡Ellos tenían oración ferviente! Una hermana anciana, ciega, con su hermana, y después también unos ancianos de la iglesia, oraron por avivamiento durante unos diez años, antes que llegó.
¡Y estamos hablando de oración VERDADERA! No este dulce "Querido Jesús, te amamos, por favor envía avivamiento." Si tú no puedes clamar desde lo más profundo de tu ser, ¡olvídalo! Si no puedes llorar desesperadamente por tu nación, ¡olvídalo! ¿Hay alguien aquí que está desesperado? - Yo estoy desesperado. Realmente estoy listo para abandonar esta nación si nada mejora. ¿Qué es lo que estoy buscando? - Simplemente HAMBRE. Nada más que hambre por Dios. Muéstrame unos americanos hambrientos por Dios, y me quedaré y seguiré predicando aquí. Si no los hay, me iré.
Yo no creo que podemos esperar el próximo movimiento de Dios en una actitud tibia, complaciente, vacilante. Es que de esta manera nunca, nunca sucedió. Creo que esto es lo que sucedió en Gales: "Dios debe amar tanto a nuestra nación, que El nos regalará el próximo avivamento sobre una bandeja de plata." Esta actitud no agrada a Dios.

Los avivamientos vienen en "olas", en espacios grandes. Cuando estuve en América por primera vez, hace unos tres años, me desperté una madrugada y Dios me dio literalmente el mensaje que debía predicar a América. Fue este: "América ha tenido un avivamiento cada cincuenta años, durante los últimos 250 años. Tienes que advertirles porque están en gran peligro de perder el próximo avivamiento." - Esto fue lo que prediqué desde entonces en todos los lugares. Porque aquí puede suceder lo mismo como en Gales. Tenemos que orar y llorar y volvernos desesperados, porque de otra manera no veremos ningún avivamiento.
Yo he estudiado la historia de avivamientos por muchos años; pero Dios tuvo que despertarme literalmente del sueño para hacerme ver este patrón de los cincuenta años. Llamé a mi padre que es también un escritor sobre avivamientos, y le dije: "Creo que hay este patrón regular en los avivamientos, compruébalo." Empezamos con el Primer Gran Avivamiento, Segundo Gran Avivamiento, Gran Avivamiento de Oración (donde dos millones de personas fueron salvos dentro de dos años), después el avivamiento de la Calle Azusa, y finalmente el "Avivamiento de sanidades" - siempre hay un espacio de aproximadamente 50 años entre ellos. Esto nos deja aquí, ahora, cincuenta años después. Empezó en 1741 y continuó hasta hoy. Y el tiempo para el siguiente avivamiento es AHORA.
Este año (2006) celebramos el aniversario de cien años del avivamiento de la Calle Azusa. Hace cincuenta años fue el fin del "avivamiento de sanidades". En 1857 fue el comienzo del Gran Avivamiento de Oración. ¿Ven cuán exactas son las fechas? La "ventana del tiempo" está abierta AHORA.

Pero yo no veo en ninguna parte de América a aquellos predicadores de arrepentimiento que podrían producir salvaciones verdaderas. Solo veo a un montón de tipos comprometidos con el mundo que ganan montones de dinero, predicando quizás 80 ó 90% de la verdad; pero el resto lo llenan con mentiras dulces, para que siga durmiendo esta nación que desesperadamente necesita arrepentirse.
Veo a mucha gente que ora a medias - incluso la gente en mi lista de correos, que se llama "la lista del avivamiento". Casi nadie de ellos ora realmente con esta desesperación. No estamos agonizando, no estamos clamando y llorando. ¿Por qué? Es que hemos engordado. "Somos ricos y nos hemos enriquecido en Cristo y no necesitamos nada más" - y es por esta actitud que creo que vamos a echar a perder el próximo avivamiento.
Yo no vine acá para decir esto - con mi esposa y mis seis hijos dejamos atrás todo lo que teníamos en Nueva Zelandia, y llegamos acá con solo una maleta y una caja cada uno; ¿ustedes creen que hicimos esto con una actitud superficial?
Yo creo realmente, muy dentro de mi corazón, que Dios desea desesperadamente un avivamiento para esta nación; mucho más de lo que nosotros nos imaginamos. Pero se necesita audacia para pedir un avivamiento.
En esta nación, en los últimos años, ha habido un movimiento masivo de dinero y de egoísmo extremo, sin precedentes en la historia. Los hombres del pasado trabajaban duro, y hubo personas piadosas y avivamientos. Pero en los últimos cincuenta años nos hemos vuelto adictos a "comida chatarra" espiritual y física, y ahora simplemente somos gordos y perezosos. ¡Un cristiano gordo y perezoso no orará desesperadamente por avivamiento!
Si quieres escuchar una oración desesperada, tendrás que ir a Africa o a Asia. Allí todavía hay hermanos que claman unidos desde lo profundo de su corazón, que se inclinan sobre sus rostros ante Dios y le buscan. Aquí ya no tenemos a casi nadie que sabe hacer esto.

Volviendo a las Hébridas: Una isla diminuta, y necesitaba una década de oración intensiva y masiva, para conseguir un avivamiento.
Hace poco recibí un correo de un movimiento juvenil de oración, y mencionaron sus peticiones "desesperadas" de oración: por una derrota del movimiento homosexual, que paren los abortos, etc; todos estos asuntos sociales. Pero se olvidaron completamente de la única necesidad desesperada que podría arreglar todos estos asuntos: la necesidad de avivamiento entre los cristianos. ¡Y este es uno de los pocos movimientos de oración que por lo menos hace todavía algo bueno en esta nación!
Tenemos multitudes de "profetas" viajando por el país; yo les llamo "profetas de Disneylandia". Ellos llegan a la ciudad y tienen una palabra positiva para cada persona que les esucha; incluso para cada pastor que vive en adulterio y es descubierto dos semanas después - "Gloria a Dios, profetizaremos cosas buenas sobre este hermano" - esta es la clase de profetas que tenemos hoy. Ya no tenemos profetas al estilo de Juan el Bautista. El no podría "causar comezón a nuestros oídos" como los "profetas" modernos.
¿Saldríamos nosotros a Juan el Bautista, como Judea y Jerusalén? Ellos no eran personas particularmente justos; cuando Jesús vino, muy pocos realmente le hicieron caso. Pero ellos salieron para escuchar a Juan; salieron por miles para escucharle reprenderles, para recibir una reprensión de parte del profeta de Dios. Yo no creo que América hoy haría esto. Su oportunidad pasó.

¿Podremos ver algún avivamiento local? - Yo creo que sí. Podremos ver, por ejemplo, un avivamiento en cierta parte de Los Angeles; he escuchado orar a un grupo de jóvenes de allí que están realmente "desesperados". Podremos ver algunos avivamientos locales. Pero para un gran avivamiento a nivel nacional, creo que la "ventana del tiempo" ya se está cerrando. Según vi en mis estudios de la historia, estas "ventanas de tiempo" generalmente duran unos siete años; y los siete años ya están acabando.
¿Conocen ustedes la historia de Gales, después que perdieron su último avivamiento? - Hoy tienen todavía 7% de asistencia a la iglesia; y su interés espiritual es el más bajo en toda Europa.
Lo que ha mantenido la asistencia a la iglesia tan alta en América, han sido los avivamientos regulares cada cincuenta años. Y en cada generación Dios ha encontrado a intercesores para orar por avivamiento, y predicadores para predicar arrepentimiento. Pero ahora temo que la oportunidad está pasando, porque ya no tenemos esta clase de hombres. A todos nuestros predicadores que se ven prometedores y que predican arrepentimiento, les pagamos un millón de dólares y los ponemos a la televisión y les decimos: "Prediquen prosperidad, pre­diquen éxito, porque esto es lo que queremos oir." Y ellos son tan estúpidos para creernos. Y de esta manera hemos arruinado a cada joven predicador y profeta que pudimos encontrar.
- Y por mientras seguimos vendiendo a nuestros hijos, y nuestra pereza nos va a arruinar.

¿Y saben qué estamos haciendo con nuestras riquezas y con nuestra televisión? Ahora estamos transmitiendo la prédica de la prosperidad a Africa y Asia, y los líderes cristianos allí nos están escuchando, y empiezan a explotar a sus ovejas de la misma manera como lo hacemos nosotros.
Hace poco hubo unas profecías de que toda California será destruida por un gran terremoto, y yo creo que puede ser verdad. ¿Saben por qué? - Es en California donde se encuentra la industria pornográfica más grande del mundo. Es desde allí que empezaron a poner pornografía en la internet e hicieron una ganancia enorme con ello. Es en California donde se encuentra Hollywood, y la juventud del mundo entero mira las películas de Hollywood. La América que ven en estas películas, es una parodia totalmente enfermiza: todo es sexo y violencia, y cada año se vuelve peor. Yo no dejo a mis hijos mirar ninguna televisión en este país, porque aun las propagandas son tan terribles. Es con esto que alimentamos a todas las naciones del mundo, y con esto estamos destruyendo a todas las naciones del mundo; porque las naciones miran hacia América y dicen: "América es rica. América ha usado su libertad para hacerse rica. América está llena de éxito." - Y de esta manera estamos envenenando el mundo entero.
Hubo una noticia acerca de unos niños de Nueva Zelandia que miraron una película americana acerca de unas pandillas. Ellos decidieron copiar lo que vieron en la película, golpearon a un muchacho y realmente cortaron con un cuchillo sus inicales en el cuerpo del chico, ¡porque esto era lo que habían visto en la película!
Me recuerdo cuando los niños americanos de unos diez años todos empezaron a ponerse sus gorras de béisbol al revés: todos los niños de Nueva Zelandia empezaron a comprarse gorras de béisbol y a ponérselas al revés; solo para parecerse a los niños americanos. ¡Tal es la influencia que América tiene en el mundo entero - en lo bueno, en lo malo, y en lo trivial!
Dios pedirá cuentas de ustedes; esto es cierto. Dios juzgará a América de manera más estricta, porque América es el líder del mundo. Los predicadores americanos, cuando viajan al extranjero, siempre consiguen una audiencia - no importa que sea el peor predicador del mundo; el hecho de que es americano, es suficiente. ¿Por qué es esto? - Sea para mal o para bien, América ha sido un líder de las naciones por muchos años (y en el pasado, realmente era para bien en muchos casos).

¿Encontraremos todavía un camino hacia el próximo avivamiento?
Realmente me quedé decepcionado anoche. Me quedé decepcionado de que no nos hayamos inclinado todos sobre nuestros rostros para llorar y clamar ante Dios. Cuando alguien nos llama a desesperarnos por avivamiento, y nosotros pensamos que no necesitamos desesperarnos, entonces somos insensatos. De todas las naciones del mundo, en ninguna la situación es tan desesperada como aquí. Y lo más triste es que no lo sabemos; no tenemos ninguna idea de cuán mal están las cosas.
Ustedes están en camino de convertirse en otro Gales. Yo no estaré aquí cuando esto suceda; yo seguiré predicando en países donde sí hay hambre por Dios; o regresaré a Nueva Zelandia. Pero no me quedaré mirando como América vende todo su futuro.

Vamos a Lucas 6:20. Esto es cómo Jesús valora a aquellos que tienen hambre por Dios; y a los pobres. "Bienaventurados vosotros los pobres; porque vuestro es el reino de Dios." - Nos gusta leer aquí "los pobres en espíritu", porque nos hemos acostumbrado tanto a pensar que cuando nos volvemos ricos materialmente, somos también ricos espiritualmente - hemos creído una mentira. Esto nos hace pasivos y apáticos. ¿Saben por qué? Cuando soy rico y me enfermo, puedo pagar a un médico. Cuando mi carro se malogra, puedo hacerlo arreglar o incluso puedo comprar uno nuevo. Puedo conseguir una tarjeta de crédito y los bancos me la darán inmediatamente - porque a ellos les gusta verme endeudado hasta el cuello comprando todos los bienes que no necesito.
Esta cultura nos hace pasivos, egoístas, adictos al entretenimiento; y pasamos todo el tiempo entreteniéndonos, en vez de orar. Ya no nos gusta escuchar palabras duras, porque todo el mundo nos predica palabras dulces y palabras de éxito. Nos dicen que debemos alcanzar el "sueño americano", e incluso encuentran algunos versos bíblicos para apoyarlo - y con esta clase de prédica puedes construir una mega-iglesia.
Nos predican "recetas de éxito", de cómo ganar amigos y cómo ganar dinero, y añaden unos versos bíblicos a ello. "Dios quiere que seas exitoso, que tengas muchas cosas y vivas en abundancia" - este es el mensaje que nos gusta escuchar. Todo esto suena correcto para nosotros porque es un eco de nuestro propio "sueño americano"; el mundo nos predica el mismo mensaje: "Ten una buena carrera; cásate con una chica bonita; adquiere una casa bonita; ten un carro..." - Esta es la clase de profetas que nos gusta escuchar.
¿No es esto lo que predicamos a nuestros hijos? "Esfuérzate para ser un médico o un abogado..."
El "sueño americano" es lo contrario del Evangelio. Pero uno puede construir una mega-iglesia predicando el "sueño americano".

Lucas 6:20-24:
"Bienaventurados vosotros los pobres" (y por favor no añadan nada aquí) "porque vuestro es el reino de Dios. Bienaventurados los que ahora tenéis hambre... Bienaventurados los que ahora lloráis... Bienaventurados seréis cuando los hombres os aborrezcan, y cuando os aparten de sí, y os vituperen, y desechen vuestro nombre como malo, por causa del Hijo del Hombre. Gozaos en aquel día, y alegraos, porque he aquí vuestro galardón es grande en los cielos; porque así hacían sus padres con los profetas.”
“Mas ¡ay de vosotros, ricos! porque ya tenéis vuestro consuelo." -

¿Ustedes conocen lo que es un "premio de consolación"? En una competencia, a veces se da una pequeña recompensa a los que quedan en segundo lugar o al último; no un premio verdadero, pero un pequeño regalito. Creo que es esto lo que hemos aceptado en vez del
premio verdadero. Nos hemos contentado con el "premio de consolación".
Al hablar de avivamiento, tenemos que hacer una decisión. O optamos por un gran avivamiento; o por el "sueño americano", y la "iglesia americana", y el éxito, y los números. Podemos optar por un estilo de "vida exitosa" - ¿y qué ganamos con ello? "¡Ay de vosotros, ricos! porque ya tenéis vuestro consuelo." No recibiréis nada más en el cielo, porque ya han recibido vuestra recompensa en la tierra.
El avivamiento es lo mejor que podemos tener; y lo bueno es el enemigo de lo mejor. Tenemos que decidirnos a qué apuntamos. Y si apuntamos al premio en el cielo, entonces tenemos que dejar atrás todo lo demás, y seguir tras el premio con toda nuestra vida. Tenemos que hacerlo; porque algún día la generación de nuestros hijos se dará cuenta: "Miren, nuestros padres perdieron esta ventana de oportunidad para avivamiento; y miren qué desastre es nuestra nación ahora. ¿Te recuerdas como era cuando todavía había personas que creían en Dios?" Y la nación que una vez era grande, irá de mal en peor, con su evangelio de avaricia y egoísmo. Y esto es lo que está sucediendo ahora mismo, delante de nuestros propios ojos.

Volvamos a la historia. El "Gran Avivamiento de Oración" (1857) comenzó con un pequeño grupo de oración. Este grupo permanecía pequeño hasta que sucedió algo significante. Fue en Nueva York, y fue dirigido por Jeremiah Lamphier. El era alguien completamente desconocido; no era ningún predicador importante; lo única que hacía era conducir una reunión de oración cada mediodía. Entonces, lo que sucedió fue un gran quebrantamiento económico en Estados Unidos. Entonces los empresarios abandonaron su esperanza en el dinero, y llegaron a esta reunión de oración y empezaron a orar. La reunión creció, y las noticias acerca de estas reuniones se divulgaron, y otros empresarios en otros lugares empezaron a orar a mediodía; y esto empezó a suceder también en otras ciudades. Y de repente las reuniones de oración eran tan grandes - dos mil, tres mil personas -, que no pudieron entrar todos los que querían participar. Por todos lugares, en todas las ciudades, hubo reuniones de oración. Esto cruzó el Atlántico y llegó también a Inglaterra, Escocia y Gales.
Cincuenta años después vino el avivamiento de la Calle Azusa, y cincuenta años después el avivamiento de sanidades. Y aquí estamos nosotros, otros cincuenta años depués, ¿y qué? Hemos arruinado a todos nuestros predicadores; los hemos vendido al mejor postor. ¿Dónde encontraremos a los predicadores para el siguiente movimiento de Dios? ¿Dónde encontraremos a los intercesores que dejen sus televisores de un lado - si no los rompen en pedazos - y empiecen a clamar y llorar ante Dios por esta generación perdida? ¿Dónde están?

Charles Finney, cuando viajaba buscando la dirección de Dios, continuamente recibía invitaciones porque él era un predicador de avivamiento. Y la gente sabía que el avivamiento iba a llegar con Finney, porque él tenía una tal unción de Dios. Entonces, una pregunta que Finney siempre hacía para decidirse adónde ir, era: "¿Ha sido el espíritu de oración derramado en este lugar?" Esta fue siempre su primera pregunta. Porque si no había espíritu de oración, Finney no iba a ir allí. - Con él trabajaba un grupo de intercesores. El líder de este grupo, Daniel Nash, iba unos días antes al lugar adónde iba a llegar Finney; y nadie le iba a ver. Nash se retiraba en algún sótano o algún cuarto, clamando, llorando, agonizando y luchando en oración con algunas pocas personas, durante todos los días antes y durante la predicación de Finney.
Entonces ¿qué quería decir Finney cuando hablaba del "espíritu de oración"? - El quería saber si los cristianos de ese lugar se reunían de rodillas, clamando y llorando ante Dios por horas sin poder parar. Esto era lo que él buscaba. Si esto no sucedía, Finney decía: "No voy a ir a ese lugar; no va a haber avivamiento, porque el espíritu de oración no está allí."
Incluso de su propio ministerio, él dijo: "Cuando no tengo el espíritu de oración por un día, o incluso por una hora, no puedo predicar con poder."
Nosotros tenemos púlpitos sin oración hoy. Pensamos que tenemos reuniones de oración, pero ¿tenemos verdadera oración? - En las reuniones de oración que he conocido, la música dura más tiempo que la oración. Las palabras de introducción a la oración duran más tiempo que la oración. Y todo el mundo está sentado allí como muñecos mudos, ni siquiera apoyando al hermano que ora a voz alta; ni mucho menos orando ellos mismos. Yo llamo esto una "reunión de no-oración".
Hemos olvidado completamente toda lección sobre avivamiento que hemos aprendido alguna vez en el pasado. ¿Tenemos a alguien aquí que sabe agonizar en oración? Lee sobre los avivamientos con Finney; lee sobre Calle Azusa; lee sobre el avivamiento en Gales - siempre encontrarás lo mismo: "Estábamos agonizando en oración." "Estabamos luchando con Dios en oración como Jacob luchaba con el ángel." "Estábamos clamando: ¡Dios, derrama Tu Espíritu sobre nosotros!" Oración desde lo más profundo de nuestro ser. Si no sabes orar así, ¡olvídalo!
Por tres años he buscado, y encontré apenas alguien que fuera capaz de orar así, o de predicar sobre ello. Constantemente estoy hablando de ello - ¿hay alguien que me está escuchando? Todo el mundo está ocupado mirando la televisión cristiana, o imitando las recetas de éxito del "pensamiento positivo" y del crecimiento de iglesias. Demasiado ocupados siguiendo el "circo profético" que solo repite los mensajes del "sueño americano".
¿Podemos encontrar en algún lugar del Antiguo o Nuevo Testamento a algún profeta que hablaba a cada persona en la congregación, diciendo: "Dios te usará grandemente, tendrás un ministerio maravilloso..."? "Paz y seguridad" - este era el mensaje de los falsos profetas. Y si la gente hubiera tenido alguna inteligencia, entonces hubieron levantado sus piedras y los hubieran apedreado.

Luc.6:24-26
"Mas ¡ay de vosotros, ricos! porque ya tenéis vuestro consuelo." - "¡Ay de vosotros, los que ahora estáis saciados! porque tendréis hambre. ¡Ay de vosotros, los que ahora reís! porque lamentaréis y lloraréis. ¡Ay de vosotros, cuando todos los hombres hablen bien de vosotros! porque así hacían sus padres con los falsos profetas."

Apocalipsis 3 - noten la similitud de este pasaje con lo que acabamos de leer. Este es un cuadro exacto de la iglesia americana en este momento.
Apoc.3:14: "Y al ángel de la iglesia en Laodicea escribe: He aquí el Amén, el testigo fiel y verdadero, el principio de la creación de Dios, dice esto:
Yo conozco tus obras, que no eres frío ni caliente. ¡Oh, que fueses frío o caliente! Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de tu boca. Porque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y no necesito nada; y no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo..."

¿Qué es lo que El nos aconseja? Básicamente: ¡Arrepiéntanse! - ¿De qué tenemos que arrepentirnos en este país? - Hay un dicho antiguo que dice: "El último en ver el agua, es el pez." - ¿Cómo lo aplicamos en nuestra situación? - "El último en ver el estado rico, perezoso, apóstata de la iglesia, es el cristiano americano."
"El último en ver el agua, es el pez." - porque el pez ha crecido toda su vida nadando en esta agua; es su elemento natural, y no puede ver nada allí. Y nuestro elemento natural es enfermizo más allá de toda descripción; pero nos hemos acostumbrado tanto a nadar en ello que ni siquiera lo podemos ver. Y cuando escuchamos estos mensajes de "éxito", somos tan ciegos que creemos que es la verdad.
Nuestra cultura es exactamente lo opuesto de lo que dijo Jesús acerca del dinero, acerca del materialismo, y acerca de la manera como debemos vivir. La primera iglesia alimentaba a los pobres diariamente; estaban dispuestos a dar todas sus posesiones y no los consideraban su propiedad; nuestra cultura es exactamente lo opuesto y ni siquiera nos damos cuenta. El pez que no ve el agua, lo somos nosotros.

Yo no tengo ninguna idea de cuánto tiempo exactamente durará la "ventana de oportunidad". Pero yo creo que cuando Dios me envió a Estados Unidos, que en ese tiempo se abrió esta ventana; porque yo no tenía ninguna idea acerca de este patrón de avivamientos, hasta que Dios me despertó con ello. Por eso yo creo que ya estamos dentro de esta ventana, y no tenemos mucho tiempo.
¿Qué sucedió en Gales cuando ellos perdieron su último avivamiento? Yo creo que su "ventana de oportunidad" se abrió en 1947 - de hecho, el ministerio de Billy Graham empezó en 1947, y por los primeros diez años él era un predicador de avivamiento. Ustedes encontrarán esto en sus primeras prédicas: en aquel tiempo, su prédica era Arrepentimiento. El era completamente diferente de lo que predica hoy. Y él era algo como el "brazo conservador" del avivamiento de sanidades, que paralelamente sucedió en los círculos pentecostales. Y muchos le escucharon.
Mi padre se convirtió en una campaña de Billy Graham en Nueva Zelandia en 1955. Prácticamente todo el país se detuvo para escuchar el mensaje de Billy Graham. En sus reuniones, podías dejar tu carro afuera con la llave puesta, y nadie lo iba a tocar. Tal fue la ola de justicia que pasó sobre el país.
Este avivamiento terminó en 1955 - aunque Graham y los otros evangelistas continuaron con sus ministerios, el poder de Dios sobre América había terminado. 1956 fue el comienzo de una decadencia terrible con muchos desastres. Muchos evangelistas sucumbieron al alcohol, las mujeres, el dinero, la fama. El "avivamiento de sanidades" terminó peor que cualquier otro avivamiento en la historia. Es por eso que hasta hoy, todos los evangelistas de sanidad parecen predicar solo sobre dinero - esta es la herencia de los desastres que pusieron fin al "avivamiento de sanidades".
50 años después estamos cosechando los frutos de todo esto. ¿Seremos otro Gales? Que Dios nos ayude.

Concluiré simplemente entrando en oración. Quiero que todos se pongan de pie para orar.
Ahora, quiero que tengan en mente que este pequeño tiempo de oración que tendremos ahora (aunque sea "largo"), es realmente algo muy pequeño. Tú no puedes salir de aquí, habiendo escuchado este mensaje y habiendo participado en este corto tiempo de oración, y después volver a tu estilo de vida de antes. Realmente necesitas continuar orando y clamando a Dios por avivamiento, tú en tu cuarto, por horas - o una generación entera será perdida.
Entonces oraremos ahora, y aprende a agonizar y clamar en oración tú mismo, cuando estás solo, o en grupos pequeños - si no recuperamos esta clase de oración, no podremos hacer absolutamente nada.
Oremos...

Lea también: "Promesas y peticiones de la oración por avivamiento"