14. ¿Qué en todo el mundo es "koinonía"?
La palabra griega "koinonía" es la palabra que se refiere a la "comunión" profunda que los primeros cirstianos tenían juntos. Es algo que anhelan muchos cristianos hoy, y es realmente la esencia de la "vida eclesiástica" en la Biblia. Pero a gran medida, la iglesia moderna parece haberlo perdido.
Cuando tenemos un "servicio" o una reunión hoy, donde todos vienen y se sientan en filas mirando adelante, cantan unos coros y escuchan la prédica, después dicen "Dios te bendiga" a algunas personas y van a casa - esto es lejos de "koinonía" verdadera. Aun en un buen número de células y reuniones en casa hoy, hay poca comunión profunda. Es más como un "culto en miniatura", donde unos pocos hacen todo el "ministerio" y el resto está sentado y mira.
Tenemos que darnos cuenta de que "koinonía" estaba en el centro del estilo de vida de la iglesia temprana. Sin esto, yo creo que no tenemos realmente "iglesia". Podemos tener una "reunión", pero no tenemos comunión. Y sin esto, realmente no tenemos nada.
"Koinonía" depende de una cosa sobre todo. Depende de un grupo de personas unidas que son realmente personas "lavadas en la sangre" y "llenos del Espíritu". Porque yo creo que esta clase de comunión profunda y gozo y unidad involucra una "conexión de corazón" a un nivel realmente espiritual - de manera que el Espíritu Santo pueda realmente fluir.
Pero la "koinonía" de la iglesia temprana involucraba otras cosas más. Por ejemplo, es claro que en sus reuniones "de casa en casa" ellos se reunían alrededor de una COMIDA, y también alrededor de la CENA DEL SEÑOR. (Más adelante más sobre ello.) Los primeros cristianos participaban en la comunión CADA DÍA en sus casas - tan importante fue para ellos.
Ahora, ¿es necesario que Ud. sea una "persona especial" o un anciano para decir la bendición sobre la Santa Cena y partir el pan con otros creyentes en su casa? - De ninguna manera. TODOS somos el "real sacerdocio". TODOS deberíamos hacer estas cosas. Debemos darnos cuenta de cuán importante es partir el pan juntos con nuestras familias, nuestros grupos de oración, nuestras reuniones en casa, etc. Creo que no volveremos nunca a una verdadera "koinonía" del Nuevo Testamento sin hacer esto.
La otra cosa que hicieron en sus reuniones en casa (que eran realmente sus reuniones principales de "comunión"), fue dar lugar y animar a que CADA PERSONA practique los dones del Espíritu Santo. Cada creyente lleno del Espíritu fue valorado por lo que era, y por los dones que tenía. Lea esto muy cuidadosamente: "Cuando os reunís, CADA UNO de vosotros tiene salmo, tiene doctrina, tiene lengua, tiene revelación, tiene interpretación. Hágase todo para edificación." (1 Cor.14:26)
(Recuerde, esta clase de reunión es muy diferente de las grandes reuniones al aire libre que tenían los apóstoles. Aquí hablamos de las "reuniones en casa" más íntimas.)
Note también que esto es muy diferente de los "grupos de discusión" y Estudios Bíblicos que tenemos hoy. Esto fue una reunión en casa con el propósito específico de ver que el Espíritu Santo se mueva y que los miembros del Cuerpo todos se ministren unos a otros con sus dones espirituales. Creo que tenemos que caminar por este camino muy conscientemente si queremos que esto suceda en nuestras reuniones. Nuevos creyentes tienen que ser enseñados cómo moverse en los dones, y tiene que haber un ambiente donde esto es "normal". Tenemos que escoger si solamente queremos estar sentados "discutiendo" sobre cosas, o si queremos invitar al Espíritu Santo para que El se haga cargo.
Note que Pablo dice que "TODOS" deben estar utilizando sus dones espirituales en estas reuniones, y que es muy importante que TODOS estos dones se manifiesten. Cánticos espirituales, enseñanzas, profecías, lenguas e interpretación - todas estas cosas. Y yo estoy seguro, si hubiera personas enfermas u oprimidas allí, entonces habría oración por ellos también. Estas fueron verdaderas "reuniones del Espíritu Santo", ¡y para ellos esto fue la "iglesia normal"!
Parece que estas "comuniones en casa" tenían ancianos que encaminaban las cosas, y que traían corrección si las cosas iban a desviarse o si alguien iba a traer algún engaño. Pero yo creo que el papel de un anciano es más o menos el papel de un "padre". Un padre que desea ver a los hijos de Dios caminar libremente en los dones espirituales y volverse maduros en la fe. No creo que un "anciano" verdadero iba a dominar tales reuniones, más bien iba a animar a otros a involucrarse tanto como fuera posible. Sin embargo, a veces es su responsabilidad enseñar a los demás donde fuera necesario.
Imagínese cómo sería si todas nuestras reuniones en casa serían así. Imagínese compartir una comida juntos, todos de la misma olla, después participar de la Cena del Señor juntos - y después pasar a un tiempo donde los miembros del Cuerpo todos ministran unos a otros en dones espirituales. Mientras todos estamos en oración, habrá lenguas e interpretaciones y profecías. Habrá cánticos espirituales o palabras de conocimiento. Alguien compartirá un testimonio o una necesidad de oración o una palabra de enseñanza.
Lo que hacemos en un tal ambiente, es dar libertad al Espíritu Santo para que fluya a través de nosotros como El quiere. Y esto es exactamente lo que significaba ser parte de la iglesia temprana. Entonces, ¿¿qué esperamos??
Arriba mencioné que la "koinonía" profunda es muy
diferente de juntarse para tener una conversación.
Interesantemente, alguien que está involucrado en el movimiento
de las "iglesias en casa", me escribió un email muy
significativo, describiendo como parecía que sus reuniones nunca
iban a entrar en una verdadera "koinonía":
"En nuestras reuniones libres, esto no sucede. ¡Sucedía
incluso más es algunas de nuestras iglesias religiosas
organizadas! Todos pasan tanto tiempo hablando acerca del modelo
relacional correcto de la iglesia, la doctrina correcta, etc, que
los dones espirituales han sido marginados."
Otra pareja escribió: "Cuando el movimiento carismático
empezó en los años 60, fuimos parte de reuniones en casa
exactamente como Ud. describió. Fue maravilloso. Todos
compartían tal como les movía el Espíritu Santo. A los bebés
se les concedía un poco de gracia si se alargaban demasiado, y
les tomamos aparte con gentileza si estaban equivocados o
necesitaban ayuda. Las reuniones eran en la sala y el comedor
estaba al lado; allí se reunían las mamás con bebés, donde
los bebés podían gatear alrededor mientras las mamás podían
escuchar y participar si les guiaba el Espíritu Santo. Los
niños más grande jugaban en el dormitorio de la familia
anfitriona con otros niños, o participaban en las reuniones.
Ningún niño fue llevado aparte a una "iglesia de
niños". Creemos que la unción ministraba a los niños, no
importaba si estaban pointando dibujos o sentados, escuchando
tranquilamente, o dormidos en el suelo.
Cuan maravilloso fue... y así debería seguir."
Muchos de nosotros hemos aprendido que la Comunión (la Santa Cena) es solo algo "simbólico", o simplemente un "recuerdo". Pero es claro desde el Nuevo Testamento que los primeros cristianos lo vieron como algo mucho más. De otro modo, ¿por qué hubieran participado de la comunión CADA DÍA "de casa en casa"? Un ritual simbólico no habría sido TAN urgente, ¿verdad? Y también, si es solo "simbólico", ¿por qué dijo Pablo que una actitud equivocada hacia ello causó que algunos cristianos en Corinto se enfermaron - y algunos incluso MURIERON? (1 Cor.11:29-30) ¿Cómo puede un mero "símbolo" tener el poder de hacer enfermar a personas que abusan de él?
El hecho es, igual como el bautismo, la Cena del Señor no es ningún "símbolo". Es una nueva participación muy real de la "VIDA" de Jesús. Y es muy claro desde todos los pasajes del Nuevo Testamento que los apóstoles estaban muy conscientes de su poder e importancia.
Ahora debemos tener cuidado de no ir demasiado lejos con esto. Es que la iglesia católica tiene un entendimiento muy extraño acerca de la comunión. Ellos creen que se convierte en la CARNE FÍSICA real, y la SANGRE FÍSICA real de Jesús. Esto es sorprendente. ¿Puede Ud. imaginarse comer carne humana verdadera, y beber sangre humana verdadera? ¡No es extraño que los protestantes corrieron una milla en la dirección opuesta! Sin embargo, basado en las Escrituras es obvio que en la comunión participamos realmente de VIDA ESPIRITUAL del tipo más potente - un verdadero refrigerio del "Pan de la Vida" dentro de nosotros, y de la "Sangre del Nuevo Pacto" que nos limpia del pecado. Se supone que participemos de ello por FE - una impartición fresca de la esencia de Jesús mismo. Podríamos incluso describirlo como una manera de refrescar la experiencia de nacer de nuevo, en cierta manera.
Todo esto suena bastante dramático. ¿Pero hay realmente una
prueba de ello en las Escrituras? - Veremos:
Recuerde las palabras de Jesús cuando el participó de la Cena
del Señor con Sus discípulos: "Y mientras comían, tomó
Jesús el pan, y bendijo, y lo partió, y dio a sus discípulos,
y dijo: Tomad, comed; ESTO ES MI CUERPO. Y tomando la copa, y
habiendo dado gracias, les dio, dicioendo: Bebed de ella todos;
porque ESTO ES MI SANGRE del nuevo pacto, que por muchos es
derramada para remisión de pecados." (Mat.26:26-28)
Note que El no dijo, "Esto es un SÍMBOLO de mi cuerpo" o "de mi sangre". El dijo: "Esto ES mi cuerpo, Esto ES mi sangre." Y esta es claramente la manera como Sus seguidores debían tratar la Comunión desde entonces. Iba a ser una participación REAL de todo el empoderamiento y purificaicón que se encuentra en el cuerpo espiritual y la sangre espiritual de Jesús. Fue para ser recibido por FE, recibiendo de Dios una impartición fresca cada vez.
Recuerde, Jesús había dicho estas palabras dramáticas: "De cierto, de cierto os digo: Si no coméis la carne del Hijo del Hombre, y bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros. ... Porque mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida." (Juan 6:53-55). En el mismo pasaje, El había hablado de sí mismo como "el pan de la vida", "el pan que descendió del cielo... el que come de este pan, vivirá eternamente." (Juan 6:58).
Ahora sabemos que Jesús es también "el Verbo (la Palabra) de Dios". Esta es la verdadera esencia de lo que participamos aquí. Y también sabemos de qué se trata con la "sangre". Por todas las Escrituras, se nos dice que "la VIDA está en la sangre", y que la sangre de Jesús "nos limpia de todo pecado". Mis amigos, ¿están Uds. listos para participar de la comunión como una impartición fresca de estas mismas cosas para Uds.? Entonces, Ud. está listo para participar de ello exactamente como lo hicieron en el libro de Hechos. Esta es claramente la razón por qué lo hicieron cada día. TAN importante fue. Ellos usaron la Comunión como un medio de "permanecer en Jesús" y de participar de su VIDA una vez más. Fue como los israelitas que participaron del "maná" en el desierto cada día para mantenerse vivos.
En los tiempos modernos, escuché de casos donde personas
fueron físicamente sanados al participar de la comunión en esta
manera más profunda. Esto no es sorprendente, puesto que están
participando de la misma vida y de la purificación de Jesús por
fe. Realmente necesitamos estar haciendo esto todo el tiempo -
igual como la iglesia temprana.
Entonces, ¿qué estaban haciendo los corintios para que el poder de la Comunión se volviera en contra de ellos? Cuando Ud. lee el pasaje entero (1 Cor.11:17-34), Ud. verá que los problemas principales eran: 1) Divisiones entre ellos, 2) No "preferirse" unos a otros, y 3) Participar de la Comunión en una manera muy carnal.
Recuerde, en la Comunión se trata de participar del "un solo cuerpo" de Jesucristo. Entonces es no solamente "ser uno" con Jesús; es también "ser uno" con nuestros hermanos y hermanas. Es un asunto de verdadera unidad del corazón. Por eso, Pablo dice: "Pruébese cada uno a sí mismo, y coma así del pan, y beba de la copa. Porque el que come y bebe indignamente, sin discernir el cuerpo del Señor, juicio come y bebe para sí." (1 Cor.11:28-29) Entonces la "unidad de corazón" entre los hermanos es muy importante. Si Ud. tiene algo en contra de un hermano o una hermana, es importante ir y arreglar las cosas antes de tomar la Comunión.
Para beneficiarse más de la Comunión, yo creo que es importante al orar una bendición sobre ella, bendecirlo pública y abiertamente como "el cuerpo de Jesús" para nosotros (el "pan de vida"), y también la verdadera "sangre del Nuevo Pacto". Orar esto sobre la Comunión es importante para que las personas que participen puedan tener la FE de que realmente SERÁ ESTO para ellos. Entonces serán realmente capaces de entrar en ello.
Recuerde, nosotros TODOS somos "real sacerdocio"; por tanto cualquiera de nosotros puede orar y partir el pan entre nosotros en nuestras propias casas y reuniones.
En nuestras reuniones en casa en Kansas City últimamente, empezamos a compartir una comida y también la Comunión juntos, y después pasar a un tiempo donde cada uno usa sus dones espirituales. Ha sido maravilloso hasta ahora, y puedo ver por qué esta manera sencilla de reunirse funcionaba tan bien en la iglesia temprana. A veces realmente sentimos que podríamos estar en Hechos. Estoy más y más convencido de que el Espíritu Santo quiere fluir mucho más de lo que le permitimos en muchas de nuestras reuniones. El solamente espera ser invitado.
Acabo de leer un librito maravilloso acerca de un avivamiento que sucedió en Papua Nueva Guinea en los años 70 y 80. Realmente, este avivamiento estaba basado en las cosas que estamos discutiendo aquí - la SENCILLEZ maravillosa del cristianismo del Nuevo Testamento. Ellos aprendieron a hacer todo tal como lo vieron escrito en Hechos.
Todo empezó cuando algunos misioneros y enfermeras en un hospital misionero se arrepintieron profundamente y fueron llenos del Espíritu Santo. Este movimiento pronto se extendió más allá del hospital, y Dios los desafió a empezar a vivir la "vida de la iglesia" como en la Biblia. Cuando alguien se arrepentía, en vez de esperar por semanas o meses, lo bautizaron de frente en el río y oraron para que reciba el Espíritu Santo. Sanidades empezaron a suceder. Demonios fueron expulsados. Ellos fueron guiados a acortar los sermones, y en lugar de ello permitir a los miembros del cuerpo que ministren unos a otros en sus reuniones. Los dones espirituales empezaron a fluir entre TODOS los creyentes, como en la Biblia. Cristianos "ordinarios" fueron animados a tomar la Comunión en sus casas y a bautizar a personas. ¡Esto "explotó" y se extendió de pueblo en pueblo! Los "creyentes ordinarios" fueron equipados para hacer la obra del reino.
Y todo lo que hacían fueron las cosas SENCILLAS. Simplemente ser lleno del Espíritu Santo y tener "koinonía" y hacer las cosas básicas que están en el Nuevo Testamento. Repentinamente el Espíritu Santo pudo fluir. Y así, ¡un gran AVIVAMIENTO vino mayormente por la práctica de estos conceptos de "koinonía" que describimos!
Cuán sencillo es empezar a poner en práctica estas cosas, mis amigos. ¡No lo posterguemos!